viernes, enero 09, 2009

CONVERSACIONES CON CHÁVEZ.

Separación desde la fuente, impulsando la Reducción, Reuso y Reciclaje.
“El Socialismo del Siglo 21, no soporta más un
Servicio de Aseo Urbano y Domiciliario No Sustentable, vienen las 3R”.-
Especial: PROLIDICE-NIUS.-

El Presidente sentenció: “El Socialismo del Siglo 21 no puede tolerar tanta torpeza en esta materia, ya han pasado más de 10 años y la negligencia de los responsables (me incluyo), autoridades con total desconocimiento, la viveza de las empresas prestadoras de este importante servicio y un usuario no educado, conllevan a tener un servicio tan deprimente, debemos en muy a corto plazo salvar el país de una catástrofe sanitaria. “

(Miraflores. Enero 2009).- Ha principios del año 2008 logramos conversar con el ciudadano Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Comandante Hugo Chávez, sobre la problemática de los Desechos Sólidos en Venezuela, hoy dentro de los pocos momentos en los cuales puede atender a la prensa, motivado a las constantes reuniones con miras a lograr los objetivos planteados en la Misión Humanitaria para rescatar a los secuestrados por las FARC, la campaña por la Enmienda Constitucional, el problema de la situación en el Medio Oriente, no podíamos menos que solicitar su opinión y agradecer en nombre de los vecinos de la Urb. Obrera Municipal Lídice, el acceder a conversar de nuevo sobre la problemática de los desechos sólidos, tema tradicional sobre todo en diciembre y al cual nos tienen acostumbrados el Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, la Alcaldía Mayor, Alcaldías Municipales y las empresas prestadoras de este importante servicio público.

(PN) Buenas noches (2:30 a.m.) Sr. Presidente, ante todo Feliz Año (abrazo), es muy gratificante que nos pueda atender dejando por un rato otros importantes asuntos, pero creemos muy necesario conocer de nuevo su opinión, tal como lo hicimos hace ya un año, sobre la problemática nacional de la basura que anualmente se presenta y que tiene su máxima expresión en épocas decembrinas, y este diciembre 2008 no fue nada igual a los anteriores, ya que fueron batidos records municipales en recolección de basura y si le ponemos microscopio, récords en botar dinero a la basura por no aprovechar los desechos sólidos de otra manera. ¿Qué puede decirnos al respecto?

(HCh) Que tal? Encantado de nuevo, es grato recibir y hablar con la gente de PROLIDICE, y aprovecho para enviarle un caluroso saludo de Año Nuevo a toda la comunidad de la Urb. Obrera Municipal Lídice allá en La Pastora, mucho más cuando el pasado 24 de diciembre de 2007, la urbanización cumplió 65 años de inaugurada, les recuerdo que estoy pendiente con el asunto ese de los Títulos de Propiedad que tienen 15 años esperando su entrega, Freddy me echo un cuento hace ya 5 años y no resolvió nada, recuerdo que lo dijo en un Aló Presidente que se hizo desde la Parroquia la Vega antes del Golpe de Estado. De todas formas, hablare con Jorge para que acelere ese asunto.

Bueno chico, la Basura, la Basura, la verdad que es un tronco de problema, pero fíjate que desde nuestra primera conversación, la cual espero puedas publicarla de nuevo para ver la diferencia con esta, creo que los gobiernos municipales y metropolitanos no han logrado mucho avance al respecto. Seguimos produciendo, tirando, recogiendo y enterrando basura sin ninguna acción sustentable, sin dar un paso estratégico para reducirla, reusarla y reciclarla. Yo pido disculpa desde mi tribuna presidencial por todos los errores en esta materia. Recuerdo que te hice mención a una Comisión Presidencial designada para investigar alrededor del mundo como se hace en otros países, bueno te tengo noticias al respecto.

La Comisión, según me informan desde el Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, se encuentra todavía viajando por el mundo, está integrada por expertos ingenieros sanitarios, sociólogos, urbanistas y arquitectos; todos muy preocupados por esta problemática y comprometidos con el Socialismo del Siglo 21, el cual no soporta un Servicio de Aseo Urbano y Domiciliario No Sustentable.


Fíjate… Víctor, he leído con suma atención los informes que esta Comisión Presidencial me ha hecho llegar, y los comparo con las excusas que seguimos dando cada año, y me encuentro con una verdad, no estamos aplicando medidas estratégicas para reducir la producción de desechos sólidos, cada año seguimos repitiendo la misma novela, y te la puedo repetir por capítulos:
1) “Es diciembre y el consumismo aumenta, Caracas produce 4 mil toneladas y en esta época llega a 6000”. (aunque se observa igual todo el año)
2) “Los ciudadanos no colaboran, falta conciencia. (¿implica esto que sobra gerencia?)
3) “Hemos pedido ayuda a Min. Ambiente, al Ejercito, integramos a la Vicepresidencia de la República y estimamos incluir al Presidente”
4) Hemos reforzado los operativos, hemos adquiridos modernos equipos ”
5) “Caracas esta limpia en 85%” (el 15% de basura restante esta distribuido por toda la capital)
6) “Posiblemente el congelamiento de las tarifas ocasiona todo este caos”, No se?

Yo me he dado cuenta de algo, si los desechos sólidos están compuestos por papel, aluminio, plástico, textiles, metales, ¿cual es la razón para no separarlos desde su fuente de producción y recogerlos selectivamente puerta a puerta?... Estamos botando una riqueza inmensa, ¿cuantas fuentes de trabajo se pueden crear a partir de la separación de los desechos sólidos? No puede ser que el origen del problema de la basura en Venezuela sea la sincerización de las tarifas y la falta de conciencia de la ciudadanía. Estoy casi convencido, que el problema radica en la falta de una gerencia experta, que sepa construir conciencia en la ciudadanía para ayudar a resolver esta problemática.

(PN) ¿Como piensa usted que se puede solucionar?

(HCh) Después de tantos años en el Gobierno, uno sabe que tiene que escuchar el entorno y tomar decisiones estratégicas, la Comisión Presidencial a través de sus informes, me ha llevado a la siguiente conclusión, debemos reforzar las 3R en materia de Desechos Sólidos, es decir, reforzar la Reducción, el Reuso y el Reciclaje, te lo explicare detallamente:
1ra R, Reducción: es primordial reducir la producción de las materias que se producen, la reducción de los desechos desde su fuente de producción es básica para impulsar las 3R, pues “el desecho que es más fácil de gerenciar es aquel que no se produce”. Reduciendo la cantidad de bienes que consumimos, disminuimos el consumo de recursos naturales y reducimos la contaminación generada por la fabricación y transporte de algún producto, todo ello alargando la vida de los rellenos, los cuales técnicamente pueden eliminarse.
2da R, Reuso: es una práctica que permite dar una segunda vida a los objetos que utilizamos en nuestra vida cotidiana. Reusar implica, reponer a buen estado lo que esta roto, darles otros usos, o de ofrecerlos aquellos que no utilizaremos más.
3ra R, Reciclaje: es la acción de transformar las materias residuales en materias primas para la fabricación de otros productos. Es el proceso que permita metamorfosear su botella plástica de agua o refresco en una útil chaqueta de lana sintética.
Esto debemos aplicarlo pronto, y aprovecho la oportunidad para hacer un llamado al Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, a los Gobernadores, al Alcalde Mayor, a los Alcaldes Metropolitanos y de todo el país, por favor señores… ante el manejo de los desechos sólidos, no sigan implementado planes estratégicos que no busquen la sustentabilidad del ambiente, debemos ser honestos con la Revolución Bolivariana. No es justo que cada año de esta revolución tengamos que pasar pena.

(PN) Todo eso suena muy bien Presidente, pero no cree ud. que se debería darse un impulso más especifico?

(HC) Exactamente, no me he quedado solo con los informes, en mis frecuentes giras al exterior he puesto a parte de mi equipo a investigar, me informan que en muchas de las ciudades que hemos visitado, se aplica desde hace muchos años la separación de los desechos sólidos desde su fuente de producción, y un sistema de recolección selectiva puerta a puerta, esto es un paso primordial para combatir de forma estratégica el problema de la basura, estoy totalmente convencido.


(HCh) Para dar impulso en esta materia, ya tengo casi listo un decreto de Separación de los desechos sólidos municipales en toda Venezuela y su respectiva recolección selectiva puerta a puerta. Esto dará una vuelta de 360º a los sistemas de servicio público de aseo urbano y domiciliario en todo el país. Vamos a dar un golpe a las mafias enquistadas en casi todas las alcaldías, que en componendas con funcionarios, se hermanan para no permitir la aplicación de métodos sustentables en materia de gestión de los desechos sólidos, no permitiré que sigamos recogiendo y enterrando basura. Promoveremos la vuelta a servicios de aseo urbano y domiciliario prestados directamente por las alcaldías, ¿te acuerdas del IMAU?, bueno será la formula, servicio prestado directamente por el municipio. Pero más importante aún, este IMAU será como lo esta haciendo Defensa Civil, será un organismo que regulara la actividad de las empresas prestadoras del servicio, impulsar la creación de empresas comunitarias sustentables de aseo urbano, recolectaran puerta a puerta los desechos sólidos separados, igual impulsará la creación de empresas acopiadoras, transportadoras y transformadoras, es decir la recicladoras, es aquí donde se podrá observar y sentir todo el potencial económico y hasta social.

(PN) ¿Y en materia de tarifas Sr. Presidente, cual será su política al respecto? Es verdad que hay que revisarlas, pero personalmente no creemos que sea la causa de tanta basura en nuestras ciudades.

(HCh) Fíjate Victor, las tarifas… no creo que las tarifas sean directamente la causa del problema, me inclino más a creer en la poca eficiencia gerencial de las empresas que prestan el servicio, la perdida en el sentido de lo que deben hacer las direcciones Municipales y el Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, es más, estoy seguro que las empresas gozan un puyero cuando presentan sus ofertas de servicio ante los representantes municipales y estos las aceptan sin revisar si estas son sustentables ambientalmente, estoy segurísimo.

(PN) Cree Ud. Sr. Presidente, que el nuevo Alcalde, el Dr. Jorge Rodriguez, esta cumpliendo la labor que usted esperaba, así como lo espero de la gestión anterior, en cuanto a lograr una solución definitiva para que todos los caraqueños tengamos un excelente Servicio Publico Sustentable de Aseo Urbano y Domiciliario? Claro y hacerlo extensivo a todos los municipios de Venezuela.

(HCh) Déjame ver que hora es… 3:30 a.m. lo que pasa es que debo revisar unas notas que hice esta tarde (día anterior) para resolver otros problemitas.

(HCh) Mira, he leído la prensa, he visto que hay una cobertura mediática intensa sobre Jorge la cual como es evidente, desea que la “Escoba nueva, barra bien”, claro cada diciembre -desde hace ya más de una década- Caracas se pone horrible con la acumulación de desechos sólidos en casi todas sus parroquias, pero yo en realidad sabía que con la disminución de la presencia de personas ejerciendo el comercio informal el problema sería de más baja intensidad. Pero lo que no entiendo, lo que no logro entender, es como que declaran una Guerra a la Basura, como si la basura viniera del espacio. Jorge creo que continua haciendo lo mismo que Freddy, emitiendo declaraciones de cuanta gente y equipamiento intervienen para recoger la basura, eso no es nada novedoso, y el estar diciendo que se batieron records de recolección en comparación con el año anterior, da a entender que estamos haciendo lo mismo pero con un pala más grande

Por ultimo, quiero que transmitas a mis camaradas y vecinos en general de la Urb. Obrera Municipal Lídice, que hablare con Jorge para que considere la necesidad de devolverle a esa comunidad el Servicio Público de Aseo Urbano y Domiciliario que le fue arrebatado hace 15 años, esa es una promesa que debo cumplir.

(PN) Sr. Presidente gracias por dar su valioso tiempo, esperamos que este humilde trabajo lo vean todos los Alcaldes de Venezuela, Bolivariano o no, que Jorge lo lea y tome algunas luces sobre lo que debe ser un Servicio Público de Aseo Urbano y Domiciliario Sustentable y Socialista. Muchas Gracias.

domingo, enero 04, 2009

Convirtiendo La Basura en Oro


Este trabajo sirve para conocer un poco màs sobre el manejo de los desechos sòlidos, mucho màs alla de simplemente reportar anualmente cuanta basura se esta recogiendo o las promesas de multar a un sector del comercio para demostrar una efectividad que hasta la fecha no da pie con bolas en los pasos estrategicos para en verdad combatir este problema.- Dedicado a los Consejos Comunales, Municipalistas, Grupos Ambientalistas, Asambleistas y Miembros del Ejecutivo Nacional.-

El siguiente articulo fue por Guy Crittenden* quien es editor-en-jefe de la revista Solid Waste & Recycling, en Markham, Ontario, y es miembro de la Sociedad de Periodistas Medioambientales.
Traducción libre Víctor González.

""No puedo ser la única persona que se pregunte a donde va nuestra basura. Como la mayoría de mis vecinos, he tomado siempre de manera familiar el que los camiones aparezcan y desaparezcan cada semana, hombres en bragas anaranjadas que gritan con jadeo y el silbido de los camiones hidráulicos al amanecer. Cuando el camión desaparece a la vuelta de la esquina, mi basura está fuera de mi vista y de mi mente.
Durante mi niñez, recuerdo que nuestra basura sé recogía en la parte de atrás de la casa donde mis padres lo guardaban en una caja de madera grande. La instalación de papá era una pieza maestra para la época. Papá no pudo predecir lo que ocurriría en las décadas siguientes. La recolección de basura en mi barrio ha pasado de una vez por semana a una vez cada dos semanas. Mi esposa y yo llevamos nuestra basura al borde de la acera y usamos una caja azul (dos realmente) para los periódicos y revistas, botellas y latas. Religiosamente enjuagamos y restregamos nuestros recipientes antes de colocarlos afuera. Una caja de madera en el patio trasero con desechos de la cocina y recortes del patio, es decir, nuestro muy propio Agujero Negro cerca del garaje.
Nunca habría creído que algún día caería en este problema. Como la mayoría de las personas, francamente no me gusta, pensar demasiado sobre mi basura. Todavía me siento comprometido de mi parte para reducir los desechos y, de mala gana, yo estoy de acuerdo en reciclar.
Pero algo sobre el actual sistema empezó a molestarme recientemente. Al principio, pensé que era toda esa "feliz charla" sobre Salvar el Ambiente que estuvo muy de moda hace unos años, pero que ahora renace hasta el punto donde quiero formar mi propio safari.. ¿Cuándo yo sugerí a mi cuñado que él usara un compostero en su casa él contestó, " No has oído acerca de la Peste Bubónica?". Supe que yo no estaba solo.
En cuanto a lo que a mí concierne, ¿Están ayudando los burócratas municipales a que yo ayude a salvar el ambiente, o están ayudando ellos a que yo les ayude a sus carreras? Ciertamente, para cada esquema de desecho desviado" hay un nuevo trabajo para “un coordinador de desechos desviados o un "gerente del reciclaje." Como otras personas, yo me pregunto cuánto exactamente todo lo reciclado ayuda al ambiente. Mi escepticismo fue confirmado un día cuando yo llevaba a un amigo desde su casa al trabajo en una compañía de reciclaje. ¿Cuándo pasamos a través de grandes áreas de tierra a lo largo del borde de un basural, él dijo, "Ves esas manchas reluciendo en la tierra? Es la luz del sol que se refleja es debido a los fragmentos de vidrio recolectados en los programas de las cajas azules." Yo no deje fuera otra botella durante meses.
Pero fue otro incidente el que provocó mi verdadera epifanía acerca de la basura. Una mañana fui despertado por el sonido del camión de reciclaje que retumbaba calle abajo y fui decidido a salir y echar una mirada. Observe como un hombre corpulento lanzó nuestra caja de reciclaje hacia el cargador trasero y activó la prensa hidráulica. Estaba de pie allí en pijamas y zapatillas, finalmente desapareció. Que es lo malo del servicio si no obtengo otra opción. Soy parte de un mercado cautivo. Si no estoy contento con mi servicio de recolección, ¿no hay otro competidor que yo puedo llamar?. Tampoco tengo idea lo que estoy pagando por la disposición de basura porque esta en alguna parte de mis impuestos de propiedad. Yo no tengo control sobre adonde mi basura y desechos reciclables son llevados, y ninguna influencia acerca del destino del medio ambiente. Con la basura, no hay ningún termostato para bajar o taladro para apagar.
Desde entonces, me he pregunto por qué asumimos que la basura residencial es un "monopolio natural", como beber agua o la electricidad. ¿Hay una explicación sensata, o es sólo fuera de hábito? Creo que yo sé la respuesta ahora.
El servicio de basura no es un grupo de cañerías o alambres que entran en mi casa. Con tal de aceptar unos cuantos camiones mas viniendo a mi calle, no hay ninguna razón lógica para que yo no puedo contratar con quien quiera para que se lleve mi basura. Yo no acepto un Plan Central estilo Soviético para la entrega de mi pizza o de mi servicio de mensajería. ¿Por qué debo ocuparme de mi basura?, ¿No es competencia bajar los precios, impulsar mejores servicios e esforzare por innovar en la mayoría de las áreas? ¿Por qué con la basura es diferente? Sin embargo hoy, en América del Norte, aceptamos que la basura sea un monopolio municipal.
Incluso para esas ciudades y pueblos que acuerdan realizar la recolección de basura a través de compañías privadas, la situación es así, cuando ordeno una pizza, yo podría llamar al Consejo Municipal. . ¿Pizza fría? ¿Tarde? ¿Toppings equivocados? Lo siento, usted debe llamar al Departamento de Servicios de Horneo, División de Masa Delgada. ¿Por qué no puedo llamar, a " Basura Express" y les hago saber que yo tengo basura hoy, no el lunes? Que tuvimos una fiesta grande anoche, y tenemos botellas extras. Me gustaría cambiar el servicio de recolección de una vez por semana a dos veces por semana. Y me gustaría no molestar ordenando nuestros desechos reciclables a futuro. ¿Podría hacerlo usted? Me gustaría que lo recogieran en la parte de atrás del patio. Y, estaríamos contentos de pagar extra por este servicio. ¿Se puede hacer esto con los desechos orgánicos? Bien, nosotros lo llamaremos, Gracias por la propina.
El problema con el monopolio de la recolección de basura residencial hoy día es más serio que el problema de la conveniencia del cliente. Como con otros monopolios y los ejercicios de la planificación central, los Zares de Basura (Ministros del Ambiente, Funcionarios Públicos) esperan sus declaraciones para sondear a través del sistema y lograr sus metas sin la existencia de un mercado libre y su fuerza más poderosa: el precio.
¿Soy yo el único que ve la similitud entre declaraciones gubernamentales que el desvío de 50% de nuestros desechos hacia el vertedero para el año 2000” y el Cuarto Plan Anual del Bloque de Países Orientales? Yo lo dudo. No es que estas metas no sean buenas. Más bien, cuestiono que la forma de lograrlas es a través de programas de educación públicos, planes maestros, subsidios e imposición de impuestos. ¿Que esperamos de una filosofía que ha fallado tan espectacularmente en el mercado de la predisposición para tener éxito en el mercado de la post-disposición?
¿Veámoslo de otra manera, no se supone que nosotros pensamos que esto es “basura”, por qué lo tratamos como basura (y lo consolidamos como a tal)? Me molesta que el pagar lo mismo en la disposición de mi basura tanto como la persona que no recicla o reduce desechos en lo absoluto. No hay ningún incentivo en la mayoría de las comunidades para reducir los desechos, embalajes y paquetes. Muchos se están dirigiendo hacia el esquema de cuota del usuario “Pague-por-la-bolsa”, y éste es ciertamente un paso en la dirección correcta. Pero no va bastante lejos. El potencial para la reducción de los desechos, reciclando y elaborando composta, me parece que, continuará siendo minado sin la competición real. Porque somos pagadores de tarifas y no clientes, no somos participantes reales en el sistema. Nuestra única influencia ha sido política que es notoriamente inexplicable. Tenemos que confiar en las promesas de políticos elegidos que ellos protegerán el ambiente en nuestro nombre. Dado su efectividad en otros problemas, ésta es una proposición muy dudosa. ¿Cuál propietario tiene el poder de cabildeo de sindicatos corporativos y del gobierno investido con sus intereses.?
Es tradición pensar acerca de la basura como algo especial que requiere que el gobierno lo observe con cuidado, para nuestro propio bien. Este pensamiento necesita ser superado porque está manteniendo el status quo. Y hay algunos que están obteniendo evidencia de que el status quo debe eliminarse, debe ser observado. Algunas preguntas legítimas deben contestarse antes de que nosotros vayamos a un sistema de laissez-faire. ¿Llevaría a más polución? ¿Serian eliminadas las grandes compañías de desechos? ¿Cuáles son los beneficios? ¿No están las cosas bien la manera en que están?
Ni el control gubernamental ni la simple privatización del monopolio de basura residencial están en el interés público. Yo definiría el "interés público" de la siguiente manera: Diferentes servicios de basura que están competitivamente tarifados y sensibles a las necesidades del cliente, al mismo tiempo compatibles en cuanto a la conservación de recursos naturales y la protección del ambiente. Parece bastante simple, pero es algo diferente de lo que la realidad actual podría ser. Y es casi imposible de lograr en un monopolio.
En los vertederos
Hablemos sobre la disposición de los desechos. Los canadienses generan alrededor de 20 millones de toneladas de basura cada año; casi la mitad proveniente de sus residencias y la otra mitad de sus negocios. Ahora mismo, 80 % de nuestra basura entra en los basurales con alguna clasificación o ninguna. En promedio, se incinera sólo %% y 15% es reciclado o convertido en composta.
En años recientes, el público ha sido molestado por promotores de varias alternativas que insisten que nosotros rechazamos la incineración, reciclamos todo, o aprobamos algún otro tipo de proyecto de gran potencia. Salvo esos afortunados que se la pasan pensando todo el día acerca de la basura, los argumentos en pro y en contra son confusos y tediosos. Los defensores aceptan a menudo datos cuestionables para convencerse de su causa. ¡Así que, la primera regla en todo asunto sobre la basura es: la Confianza en ninguno! (Sobre todo cuando ellos empiezan diciendo "Un estudio demuestra.").
Yo personalmente no cuido si la basura se enterró, se quemó, se rebanó en dados o en juliana, por lo menos no por cualquier razón ideológica. Como la mayoría de la gente, yo quiero apenas una explicación lógica de por qué yo debo favorecer una opción sobre otra acerca de la disposición de la basura, sobre todo si cuesta más dinero. Desgraciadamente, esto puede ser preguntar demasiado. Pero mi investigación en el mundo maravilloso de los vertederos, incineradores y otros proyectos me ha proporcionado unas razones para verlos con sospecha, sobre todo cuando ellos son operados públicamente.
Si los basurales fueran bellamente diseñados encima de capas profundas de arcilla, usted y yo no nos preocuparíamos demasiado de lo que entra en ellos. Pero la situación actual realmente está espantando. Yo siempre asumí que estaba pagando demasiado por la disposición de mi basura. Pero pensé que estaba consiguiendo algo por lo menos para mi dinero. Estaba equivocado.
Resulta que una gran deuda nacional no es la única cosa que Canadá comparte con los países del Tercer Mundo. Como ellos, nosotros descargamos la mayoría de nuestros desechos en pozos de baja tecnología, y el agua subterránea esta ahora contaminada. Habría pagado más por la disposición de mis desechos si hubiera sabido lo que estaba pasando.
Con Canadá con la masa de tierra más grande, el menor de nuestros problemas es la falta de espacio para excavar agujeros en la tierra. De hecho, este país tiene 2,322 basurales, sin incluir Quebec que (perturbadamente) no colecciona tal información. El Gran Saskatchewan tiene 724; la Diminuta Isla del Príncipe Eduardo tiene sólo tres. El problema es que 95 porciento de nuestros basurales son según informes recibidos "no son técnicamente construidos." Sólo 13 basurales nacionalmente han adelantado controles medioambientales. De los 89 que colectan y tratan los “lixiviados" (el líquido producido por el deterioro de la basura), la mayoría (53) se localiza en los Territorios Noroeste donde ellos deben cumplir requisitos para descargar en el Artico.
Funcionando como lo hacen, al contrario que en el mundo de la contabilidad pública, pocas ciudades se motivan en colocar fondos suficientes en el mantenimiento a largo plazo de basurales después que son cerrados o para pagar por la limpieza de la contaminación medioambiental potencial. ¿Cuándo el Toronto Metropolitano apabullo a los transportistas de la basura hace unos años con cuotas exorbitantes (alcanzando $150 por la tonelada), invirtió el dinero en mejores vertederos? No. En cambio, la ganancia se utilizo en subsidiar la seguridad social. El basurero Brock West del área metropolitana, entretanto, está goteando. Los municipalistas son buenos con la gente, y esto quiere decir, bien. Es justo que su sistema monopolista no este en correlación con la conducta del público (casual generación de desechos e impuestos hasta el cansancio, resultando en consecuencia inferior disposición en la practica). ¿Hasta realizar una comparación como si tratara de manzanas a manzanas, cuántos mejores proyectos serán cancelados porque no pueden competir con el barato vertedero local? La lista, yo estoy seguro, tomara mucho tiempo.
Breve historia sobre la basura
Nuestros conceptos sobre basura son recientes. Hasta la mitad del siglo 18, "la basura" se tiró simplemente por la ventana. Éste se volvió un problema en grandes densidades urbanas donde las condiciones antihigiénicas provocaban enfermedades. En el siglo 18 en Inglaterra y Francia, los carreteros fueron pagados por los ciudadanos para llevar basura y depositarla en las afueras de los pueblos. La disposición a hoyos abiertos se hizo rutinaria, hasta que Benjamín Franklin inicio en 1757, el primer programa municipal de limpieza de calles en Filadelfia.
Al inicio del siglo 20, el miedo a las enfermedades causado por la "miasma" que sube de los hoyos del vertederos dio lugar a las primeras técnicas sanitarias rudimentarias en los vertederos (cubrir la basura con tierra todos los días) y los basurales proliferaron por el continente, frecuentemente ubicados en pantanos y convertir estos "sitios inútiles" en tierras convenientes para desarrollarlas.
La contaminación en estos porosos vertederos es frecuente hasta estos días, y sus expectativas de vida se extienden aparentemente para siempre. (Algunos dicen que un basural sólo esta "lleno" cuando los copos de nieve en la cima se derriten con el verano.) El basural Fresh Kills en Staten Island, es nombrado como el mayor objeto hecho por el hombre, y cuentan que resume alrededor de un millón de litros de lixiviados por día.
Ardientes deseos
Siendo los vertederos tan horribles, los incineradores tienen un cierto atractivo. Cerca de 1.6 millones de toneladas de desechos canadienses se manejan esta manera. Aparte de las 52 unidades de baja tecnología en Newfoundland, hay sólo nueve incineradores de basura en todo Canadá. Realmente, llamarlos incineradores es fuerte. Desde el anuncio de que generan electricidad y vapor, se supone que nosotros los llamamos "generadores de energía". Esto va desde las plantas ineficaces más viejas a la moderna instalación de Brampton, Ontario, en Canadá. Descrito como un Gran Satanás por activistas del medioambiente.
El argumento principal contra los incineradores solía ser que emiten contaminantes mortales como dioxinas que compiten en los mismos objetivos con los programas de reciclaje. Sin embargo, recientes informaciones han cambiado estas críticas, sobre todo cuando se cae en cuenta del poder generado por librarse de la basura en lugar de quemar carbón importado. Los Estados Unidos tienen 121 incineradores, pero éstos se considerarán menos de 0.2 % de las emisiones de dioxinas cuando los sistemas viejos están cerrados o en complacencia con regulaciones recientemente promulgadas. Los vehículos a motor, por comparación, producen más del 20% del total de dioxinas. (¿Antes, usted nunca pensó en su automóvil como un incinerador móvil, ahora hágalo?)
Con la energía producida por los incineradores a partir de los desechos y que reduce volúmenes de basura entre un 80% o 90%. está claro que (en combinación con reciclar) ellos podrían reducir la cantidad de desechos que requieren los basureros casi a cero. Y, contrariamente a la creencia popular, países que confían en incineración, son aquéllos con las proporciones mas altas en reciclaje, Suiza quema 83% de sus desechos, Japón 79%, Dinamarca 62% y Suecia 58%.
Pero antes de que usted se vuelva un fanático pirotécnico, hay algo más que debe saber. Un incinerador grande exige a un suministro grande y firme de desechos para recuperar su capital alto y el coste operativo. Los operadores requieren una garantía de que ellos estarán bien haya o no desechos. Alternativamente, las municipalidades pueden asegurar un flujo de desechos hacia ellos, ("control del flujo").
Esto es grande para los financistas que ven una gran vaca de dinero efectivo. Solo entre 1982 y 1989, en Wall Street era tan bueno que subió $13.5-billion el valor de las exenciones al impuesto para construir incineradores de basura. Pero no es tan grande para los propietarios. Primero, se requiere un monopolio de basura que suprima opciones y la competición. Segundo, "control del flujo" se ha atacado repetidamente como inconstitucional. Con la basura que va a otras partes, ciudades y tenedores de bonos están perdiendo millones de dólares y obligados a cerrar. En Akron, Ohio, por ejemplo, deben $200 millón en una planta cerrada. Moody Investor ha empezado evaluar una centena de proyectos a través de Norteamérica de proyectos de desechos, representando $5 mil millones en deuda a los poseedores de bonos no asegurados. Los potenciales cierres de plantas arriesgan dólares de los contribuyentes en todo el país.
Más allá de la franja
Es tan difícil encontrar una comunidad anfitriona deseosa de tener un nuevo basural o incinerador que algunos llaman el síndrome del “No-en-mi-patrio trasero”, y ha evolucionado a “No en la Tierra” hasta” o “No construir cerca en ninguna parte”. Así que no es sorprendente que las alternativas sobre la basura tengan rangos como de planes superficiales de reciclaje agresivo hasta de póngalo en un cohete y dispárelo hacia el sol.
Algunas comunidades como Lancaster, Pennsylvania, está extendiendo la vida util de sus basurales excavándolos (llamado "basurales en mina") y reciclando o incinerando el material excavado. Otra idea popular es hacer composta de gran potencia de materiales orgánicos húmedos como los cortes del césped y restos de cocina que se procesan en montones al aire libre o en tanque gigantes cerrados. Sin embargo, la composta pueden ser la ola del futuro, muchos de estos proyectos han tenido problemas grandes con el control del olor y la contaminación del producto final (metales y varias toxinas). Algunos han tenido que cerrar.
Para evitar estos problemas, se han propuesto ideas exóticas para convertir la ” basura en oro." Una compañía ofreció manejar todos los desechos del área del Toronto Metropolitano construyendo plantas del composta que convertirían la basura en gas metano vendible y material agregado. El Toronto Metropolitano se negó ante este esquema, pero Edmonton aceptaba uno similar recientemente. TransAlta Entreprises (una subsidiaria eléctrica de Alberta) construirá una de $70-millones, donde la basura se mezclará con lodo del alcantarillado y convertido en composta. El producto final cubrirá tierras contaminadas en las minas locales.
Pero no importa que tan imaginativos sean esos faraónicos esquemas, son todos muy arriesgados en la ausencia del "control de flujo" municipal. Desde que usan "el dinero de otras personas," los funcionarios municipales aceptan a menudo el riesgo de poner todos sus huevos en una canasta. Un buen ejemplo es la progresiva ciudad de Guelph, Ontario que gastó más de $36 millones de dólares en construir un campo gigante de composta y reciclado para encontrar la mitad de lo esperado como flujo de desechos. La planta que es del tamaño de doce campos del fútbol, puede volverse bien el Aeropuerto Mirabel de la industria de la basura en Canadá. Parece pequeño y bonito, incluso para la basura.
Reciclando nuestras visiones acerca del reciclaje
En la ausencia de control del flujo, los proyectos grandes han perdido su atractivo ante muchas municipalidades y algunos están echando una segunda mirada el reciclaje. Casi un cuarto de la basura residencial es desecho seco reciclable, un tercio es papel y otro 40% es orgánico útil para la composta. Así que, él reciclaje agresivo y la composta podrían desviar potencialmente 90% de basura de los basurales, sin el incinerador a la vista.
Recientemente, no solo pensaba que los programas de reciclaje no pudieran pagarse por ellos mismos y tuvieran que depender de los subsidios estatales. Peor, el asunto a cualquier costo a la "exactitud política", y la imagen religiosa del reciclaje no fue de mucha ayuda por el entusiasmo de algunos de nuestros políticos más chiflados. Sin embargo, esta percepción cambió algo realmente el año pasado, cuando los precios subieron los artículos reciclados. Los precios para algunos materiales que previamente no podrían regalarse subieron (durante un tiempo) a centenares o miles de dólares por tonelada. La situación era recordativa a la del siglo 17, la histeria holandesa sobre los tulipanes. Los basureros ilegales rondaron las calles de ciudades canadienses por la noche, robando papel, el cartón de los jardines para vender en el mercado negro.
Sin embargo, como las flores holandesas (y todos los ciclos del artículo), los precios cayeron y la estampida fue seguida por la bancarrota. No obstante, se han establecido mejores programas, y ciertas industrias han mantenido sus compromisos de reciclar. La industria de la bebida, por ejemplo, tranquilamente a revertido el uso del aluminio de las latas para impulsar el valor de las blue box y detiene la legislación sobre el uso inconveniente de botellas de vidrio. (algunas cosas realmente van mejor con Coke.)
Varios de las historias con éxito realmente asombran. Seattle, Washington, recicla más de 30% de sus desechos residenciales y el costo combinado del proceso de recolección y comercializar es menos de los costos combinados para la disposición regular. Hamilton y otras ciudades en Canadá están registrando experiencias similares. Algunos con proporciones que no se habrían creído posibles hace sólo unos años atrás. En Missión, Columbia Británica, los reciclables y materiales orgánicos para composta, son reunidos y cargados en la cuenta del impuesto de propiedad. El año pasado, pequeñas familias pagaron $89 por la recolección de basura, pero sólo $52 por reciclar y en programas de composta. Las unidades multi-familiares pagaron $44 y las casas rurales $26 por reciclar y programas de composteo. Missión ha desviado aproximadamente 50% de sus desechos al basural con este esquema. Lunenberg, Nova Scotia, ahora desvía 88% de su basura a través de un sistema cuatro fuentes en los cuales el papel, recipientes reciclables, la cocinas desechadas y desechos son todos recolectados separadamente. La ciudad opera una de reciclaje, una unidad de composta y un basural seco para el residuo desechado. Con un ojo de éxito sobre el vecino, Halifax planea hacer la misma cosa en sólo más de 18 meses, estimando un costo entre $87 y $109 por tonelada de basura, comparada a $160 por tonelada para un propuesto incinerador.
Pero reciclando en un monopolio tiene sus limitaciones. Según un reciente estudio realizado por la revista de comercio BioCycle, el reciclaje en la acera se proporciona a la mitad de los canadienses, 5.6 millones de casas, pero se desvía sólo 15% de los desechos. Algo está errado con este tema. Es muy extraño que aunque Ontario lideriza el país con el 85% de las casas servidas para reciclaje, y aunque ha dado a sus residentes más de 700,000 cajas, y construyó 83 sitios para el composteo, desvía una proporción más baja de desechos del basural que Columbia Británica que proporciona recicla para sólo 15% de sus casas, y no tiene ningún medio para realizar el composteo. Quebecuaces pueden anhelar realizar la separación, pero no "la separación desde la fuente." La mitad de sus casas tienen reciclaje desde la acera, ellos todavía reciclan sólo 6% de sus desechos y llevan al composteo menos del 1%.
Usted no puede luchar contra el Municipio
¿Podríamos cambiar el sistema para hacer los programas de reciclaje y proyectos más eficaces? Pienso que sí. Pero mi solución es muy diferente a la de los modelos centrales proyectados. Para mí, el futuro miente autorizando directamente a las personas, sabiendo nuestros derechos y dificultando las fuerzas de precio.
Podríamos aprender una o dos cosas de la gente del siglo 13. Eso es cuando el concepto de derechos de propiedad fue establecido, y ellos disfrutaron de una interrumpida historia antes que el gobierno decidiera que era mejor cuidar nuestros intereses antes que nosotros y dejando de lado las regulaciones y estatutos medioambientales. La propiedad del derecho consuetudinario manifiesta una filosofía, "viva y permita vivir" y estipula que las actividades de una individuo, aun legales, no deben crear "molestia" para los vecinos de ese individuo interrumpiendo el "goce tranquilo" de su propiedad.
Sin embargo, existe otro sentido en cuanto al termino "Derecho a la propiedad" dentro de la industria de manejo de los desechos. Se relaciona de quien es la "propiedad" de la basura cuando se pone en la acera y, como consecuencia, lo que puede hacerse con ella. La lucha a lo largo del continente sobre el "control del flujo", realmente es un concurso sobre los derechos de la propiedad entre las municipalidades y los transportistas privados, quien conseguirá las llaves del monopolio de los desechos municipales..
Actualmente, nada detiene a un individuo que directamente contrate el servicio de acarreo de su basura desde su casa. Pero cuando se pone en la acera, se vuelve propiedad de la municipalidad o su contratista. ¡ Que alguien más tome la basura en la calle, usted puede ser acusado de haber robado! (Muchos lo han sido.)
Las transportistas privadas pueden recolectar basura más barato que el sector público, y seria muy atractivo llevar las rutas hacia ellos. A las municipalidades del área metropolitana de Toronto le cuesta $50 por la tonelada recolectar la basura, según la Asociación Administradora de Brusca de Ontario, mientras los transportistas privados pueden hacerlo por $27. Muchas jurisdicciones han contratado con transportistas privados la recolección por esta razón. Los monopolistas temporales dividirían grandes áreas urbanas en zonas más pequeñas para provocar ofertas y.. . Usted sabe la situación.
Como los leones y hienas que se alimentan en manadas, operadores municipales y contratistas privados tienen un interés en un mercado cautivo de la basura. Cuando el sector privado de las compañías de manejo de desechos se quejan que la recolección de basura debe privatizarse, significa que realmente no quieren un libre mercado de un todo, sino una porción del mercado en un monopolio regulado. Tan lejano como la comercialización de servicios públicos en el siglo 19 en Inglaterra, las consecuencias terribles de la privatización sin la competición han sido bien conocidas. Los favores de las grandes compañías pueden levantar su actuación en un buen lobby ante la Municipalidad. Y los sistemas híbridos no logran las ganancias potenciales enormes disponibles en la competición real. Las compañías o municipalidad que controlen los medios de disposición pueden poner cuotas para beneficiar sus propios servicios de recolección y marcar la diferencia contra otros.
Es extraño que las familias nunca hayan obtenido beneficio del sistema de mercado abierto que disfrutan los generadores comerciales de desechos. En la primera mitad del siglo, los desechos urbanos eran recolectados por pequeños operadores que controlaban sus rutas en cada punto de recolección, es decir, casa o apartamento, llamado ”Parada”. En realidad, este sistema tenía la apariencia de competición abierta, pero las apariencias pueden ser engañosas. Los transportistas resguardaban sus rutas de recolección celosamente. Los precios frecuentemente eran "fijos" y las “Paradas” comercializaban como tarjetas de béisbol. Puesto que esto no era estrictamente legal, las transportistas tenían a menudo que confiar en los servicios de crimen organizado para forzar los entendimientos.
Este sistema tenía un sabor a cooperativa, como en San Francisco, donde dos equipos obreros fueron autorizados para recolectar la basura doméstica de toda la ciudad de los años veinte a los años setenta. Como las compañías podían facturar a sus clientes directamente, San Francisco disfrutó de la recolección más barata del continente. Pero los distritos para recolección y las tarifas eran fijados por la municipalidad como las tarifas de teléfono y electricidad. En cierto sentido, la municipalidad tomó el lugar del crimen organizado. En otras ciudades, la recolección residencial fue tomada simplemente por el gobierno local.
En el transcurso de este siglo, lo que era una vez un negocio favorablemente fragmentado de un camión pequeño que recoge la basura, se fue consolidando hacia las grandes corporaciones multinacionales y las oligarquías municipales. A principios de los años sesenta, dos terceras partes de las ciudades habían operado sistemas municipalmente, mientras las empresas privadas dominaban los mercados comerciales y suburbanos, y la basura municipal bajo contrato en algunas áreas. La nueva legislación medioambiental precipitó la eliminación final de los transportistas cuando forzó el cierre de los vertederos locales de los que ellos dependían. Las compañías públicas sólo orientadas al crecimiento podrían permitirse el lujo de desarrollar nuevos basurales regionales. Los camiones sorprendían con nombres como Industrias Broncear-Ferris , Manejos de Desechos Inc. y Sistemas de Desechos Laidlaw.
Demandas y acusaciones han surgido en el camino, por fijaciones de precio y se han realizado cargos contra los más grandes por manejos anticompetitivos. Sin embargo, a pesar de multimillonarias multas, estas son dinero de bolsillo, al frente de los billones de dólares en oportunidades de negocio.
La competición es más importante que la propiedad privada o pública cuando se trata de proteger el interés publico. En un artículo de la Revista Harvard Business (noviembre-diciembre de 1991), John Goodman y Gary Loveman cuentan la experiencia de la ciudad de Fénix en 1978 cuando la ciudad llevó la recolección de basura hacia las empresas privadas. El departamento de trabajos públicos fue autorizado para competir. Después de perder ante los recolectores privados, el departamento de trabajos públicos introdujo innovaciones radicales que en el futuro llevaron a recobrar los contratos para las regiones de toda la municipalidad. La lección, según el Interventor de la ciudad del Fénix Jim Flanagan, era "que la distinción importante no es público contra privado, es monopolio contra competición."
Cada cual tiene su precio
La reducción es la primera de las "3Rs," pero ha sido tristemente abandonada. Porque el costo de desechos dispuestos en el vertedero claro que es un negocio, las industrias, comercios e instituciones han reducido sus desechos sólidos firmemente. En Ontario, este sector informó 1.6 millones de toneladas menos en 1993 que en 1987, en contraste severo con el sector residencial, donde los precios ocultos guardan la cantidad de desechos generados constantemente por persona.
Hasta que las familias paguen directamente por el costo de su basura, tendrán poco incentivo para cambiar sus hábitos de compras (menos productos empaquetados), reduzcan sus desechos y exploren totalmente las oportunidades que presentan el reciclaje y el composteo. Reconociendo esto, algunas comunidades están dejando caer sus proyectos sociales de ingeniería a favor de "pagar-por-bolsa" y otros programas de cuotas al usuario.
Los sistemas de cuota al usuario empezaron en los años noventa, y están en más de 2,700 comunidades de América del Norte en lugares tan políticamente diversos como Austin, Texas y Berkeley, California. Y asombra los cambios introducidos en la conducta. El usuario es llevado dramáticamente a reducir su basura y aumentar él reciclaje en más del 50%, llevando a bajar los costos para las comunidades que los han probado. Cincuenta y tres comunidades de Ontario, principalmente rurales, han introducido cuotas de basura al usuario completas o parciales. La Ciudad de St. Thomas y el Municipio de Sidney desvían ahora aproximadamente 65% de sus desechos. Las regiones de Peel y Waterloo se han convertido las primeras grandes comunidades urbanas de Canadá en proceder.
Algunas comunidades temen que se contribuya a incrementar los botes ilegales. Pero las botes ilegales serán siempre más baratos tanto como lo acepte la gente. Desde que las cuotas al usuario dejan de ser “Doble Tributación”, así mismo las municipalidades deberían quitar la basura de los impuestos a la propiedad. Peterborough y Kanata rechazaron recientemente las cuotas al usuario por otra razón. Ellos lo consideraron injusto hacia los pobres, sobretodo hacia las grandes familias. Algunas medidas podrían aliviar esto, pero la resistencia hacia las cuotas al usuario es más importante que el miedo al cambio. Se relaciona con la sospecha de que un proceso municipal de no-ganancia sin consumidores que puedan ejercer poder sobre los precios.
Un sistema del laissez-faire
Cuando las personas intentan entremeterse o controlar el sistema de precios, los resultados son desastrosos. Qué nos trae hacia el mercado municipal de basura de hoy, que funciona como una república bananera. Sí, esa misma filosofía que trajo automóviles al mundo de la agricultura cubana y a la Alemania Oriental esta en los trabajos de la oficina de planificación de la autoridad municipal de la basura de hoy. ¿No lo cree? Simplemente vaya a cualquier oficina de administración y escuche a los funcionarios municipales exaltar las virtudes de los programas asignados para “Crear un mundo mejor para nuestros niños” excepto la humanidad de ellos mismos. Usted no desea escuchar sobre aquellas municipalidades que ponen sus manos fuera del bolsillo de los contribuyentes.
Las municipalidades acostumbran servir al interés público construyendo infraestructuras de recolección y disposición. Ellos han decidido recientemente que usted y yo queremos "los programas progresivos". Pero, al parecer, no es su conducta la que tiene que cambiar; es la nuestra. Nosotros somos maniquíes que no cuidamos salvar el planeta.
Aun, usted y yo continuamos generando tantos desechos como de costumbre. Así como no necesitamos elefantes blancos municipales mayores, no necesitamos más programas de re-educación, concesiones provincianas, subsidios o incentivos. Olvídese del liderato. En cambio, no necesitamos desterrar el control del flujo de entre las líneas del estado, sino de entre las casas.
Empezando, las familias podrían contratar a quien deseen llevarse su basura, grandes y pequeñas compañías ofrecerían camiones que no chillarían y empleados que realizarían el servicio puesta-puerta y retornarían sus envases de basura a los puestos acordados.
La competición no sólo guardaría precios bajos, los convertiría en precios reales, porque el sistema ya no sería arbitrario. El "costo" de disposición de los desechos se volvería el "precio" de los costos del servicio. Las familias son como compañías que no son pagadas por sus productos. Deben pagarse a las familias en el futuro por el valor de su papel, aluminio, plásticos y vidrio. Esto simplemente se podría sumar a una reducción en los costos de recolección de sus materiales reciclables. Pero cuando los mercados crecen con una entrada grande de nuevo material, podría transformar a las familias de portadores de los precios en un sistema arbitrario a participantes autorizados en un mercado dinámico.
Las implicaciones de esto para los defensores de los basurales, incineradores y otros proyectos son enormes. Ellos serán libres, de seguro, en seguir sus planes, pero tendrán que ganar apoyo en pagar a los clientes. Es fácil imaginarse la era de los mega-proyectos que lleven al cierre de los basurales e incineradores ganando aprobación en el mercado en lugar de ganar aprobación en los vestíbulos municipales. Francamente, yo no puedo esperar verlo. Indudablemente, una plétora de opciones alternativas surgiría y (yo sospecho) que la reducción de los desechos y el reciclaje ganarían terreno.
Se puede vislumbrar lo que un mercado desencadenado puede parecer considerando lo que esta ocurriendo hoy, a pesar del monopolio de la basura. Recoger la basura ya es un negocio serio. Geoff Rathbone, director de Laidlaw Waste Systems Ltd. dice, el robo de materiales reciclables ocasiona 2 millones de dólares en costos anualmente. Cornelious Guenter, CEO de la Sociedad del reciclaje de Edmonton, estima las pérdidas anuales en $250,000 por año. North York, de Ontario estima $100,000 en un año. La municipalidad viene colocando multas hasta por $10,000 para una primera violación, y $50,000 para una corporación. Esta actividad, aunque ilegal, indica un enorme, crecimiento en la demanda para el comercio libre en materiales reciclables residenciales. Los nuevos mercados abrirían para los operadores nichos innovadores. Ninguna concesión, comités, burocracias o formulas capitalistas; haría el truco. De hecho, ya empieza pasar.
Considere al papel. Varios empresarios están teniendo éxito donde los funcionarios municipales han fallado. Una compañía pequeña, Metro Waste Paper, ahora recicla papel desde los hogares de North York, Ontario, y lo vende a los molinos. La compañía recolecciona papel en cajas con un bolsillo lateral donde coloca un volante que les informa a los clientes cuántos árboles se han salvado el ultimo mes y como los precios del papel han influidos en los artículos que comercializa, además de algunas otras informaciones. Ésta podría ser el amanecer de una nueva relación entre las familias que son reconocidas como un proveedor de material y la transportista de desechos como un cliente al por mayor. El proceso de moler la fibra, hacer el papel y venderlo a la familia origina el ciclo completo.
Considere los pañales. Casi 80% de los canadienses con niños por debajo de dos años usa pañales desechables todo el tiempo, (2% usa de tela regularmente). Ahora una compañía llamada Tecnologías de Knowaste procesa 40,000 toneladas de pañales desechables de los hospitales y los centros de guardería cada año, y está empezando a tocar el mercado residencial. Tan perspicaz es el interés público en reciclar pañales desechables que, hombres y mujeres los recolectan voluntariamente de sus vecinos y los entregan sin recargo alguno a los depósitos de las compañías de recolección. La larga fibra del pañal es buscada por la industria de la pulpa y pagada entre $300 y $600 por bulto. El plástico de los pañales se convierte en material absorbente usado en los derrames de aceite. ¡Debería haber un depósito en cada barrio!
Considere trozos de metal, textiles, vidrio y comida. Nuevas mini-fundiciones de acero ya reciclan virtualmente todas las partes de un automóvil en Norteamérica y están obligando a las viejas fundiciones a cerrarse o adaptarse. Cuando el nuevo horno de DOFASCO comenzó a operar en 1997, la demanda por chatarra de acero aumentó a 1.2 millones de toneladas por año. Para las familias, esto representa un mercado para los metales de su cuchillería desechada.
Scavenger Clothing hace uso de recortes textiles para hacer nuevas telas y reducir los costos de disposición. Consumers Glass, en Etobicoke, podría reciclar 50% más del vidrio que recicla actualmente. El vidrio puede reciclarse para siempre, reduciendo el consumo de arena, ceniza y caliza. Wilmart Recycling obtiene restos de comida de los restaurantes en la Torre de CN y otros 250 y la convierte en el alimento para animales. Wilmart sirve a cinco granjas de cerdos y está abarcando el marcado del ganado. La lista de empresarios crece sin parar.
El Boom del reciclaje esta tomando auge entre los compradores, también. Una nueva organización llamada Canadian Buy-Recycled Alliance ha sido formada por 23 patrocinantes para promocionar la compra de productos reciclados. Las grandes compañías de manejo de basura han establecido cada una sus propias divisiones para mercadear programas de materiales reciclados. Laidlaw, Servicios Medioambientales, por ejemplo, ha construido medios de alta tecnología para procesar desecho de pintura, y este material se usa ahora en varias marcas comerciales. Philip Environmental Hamilton ha invertido en el mercado del reciclaje de cable y alambre, salvando material de las fundiciones y usa basura de alto riesgo para convertirla en cemento especial. La compañía ha pasado de un pequeño negocio familiar una corporación que vende 1 billón de dólares en una década. Éstas y otras compañías como Waste Management. Inc. y BFI se balancean para capitalizar a futuro las tendencias del reciclaje.
El control del monopolio de los desechos residenciales es ahora el mayor obstáculo que bloquea el crecimiento explosivo en esta área. En octubre del año pasado, el empresario Wil Ferretti del Chicago Board of Trade, lanzó la empresa Chicago Recyclables Exchange, como sus colegas en frijoles de soja, maíz y carne de cerdo, para comercializar materiales como, plástico HDPE, vidrio y papel, por medio de 125 subscriptores, y la lista está creciendo. Todos estas empresas germinarán y florecerán alejadas de la larga y oscura sombra del control del monopolio.
Contrariamente a lo que nuestros municipalistas podrían pensar, yo espero el día cuando los diferentes camiones lleguen a mi calle para llevarse mis valiosos recursos y venderlos en el mercado. Me gustaría conseguir un boletín que me informe acerca de lo que vale mi aluminio, mis plásticos y mis papeles. Me gustaría recibir una rebaja en mi facturación de recolección de basura por la venta de estos materiales, o si por una porción de dinero la compañía que presta el servicio clasificaría la basura por mí. Pienso que muchos de mis vecinos les gustaría tener una opción sobre donde va su basura, también. Apuesto que estarían dispuestos a pagar más para que su basura no fuese a un viejo incinerador, o al botadero local que esta siendo llenado como un trasatlántico y no-protegido contra las aguas subterráneas. A largo plazo, costara mucho menos.
Cualquiera sea su decisión, yo puedo por lo menos escoger en un rango de servicios y precios. Algunos podrían escoger recolección semanal. Algunos podrían bajar sus costos reduciendo dramáticamente la cantidad de desechos generados. Otros pudieran involucrarse en el sistema, aportando sus botellas, latas, pañales y revistas a los depósitos especiales de recolección, o ofrecerlos en pequeños negocios y cooperativas. Es tiempo que el gobierno deje de intentar proteger al público de lo que quiere. Queremos nuestra libertad, y la queremos ahora. ""